Bienvenida por los trabajos de la 64a. Asamblea FLAM en Yucatán
Viernes, 10 de abril de 2015
64 ASAMBLEA ORDINARIA DE LA FLAM/UIM
Mérida, Yucatán a 8 de abril de 2015
Buenos días.
Señor Gobernador, distinguidas autoridades que conforman el presídium, invitados especiales, integrantes de la judicatura yucateca, comunidad académica, medios de comunicación, representantes de la sociedad civil, señoras y señores:
El día de hoy, nos reúne un acontecimiento histórico y trascendental para la impartición de justicia en México, y particularmente en Yucatán.
Histórico, pues nunca antes nuestra entidad había tenido el alto honor de fungir como sede de un evento que aglutina asociaciones de jueces y magistrados de Latinoamérica e Iberoamérica en un mismo foro.
Trascendental, porque los trabajos que habremos de realizar los próximos días, seguramente se traducirán en acciones concretas que fortalezcan el quehacer jurisdiccional de nuestras regiones y continentes.
Por eso, celebro que hoy sea una realidad tangible aquello que hace unos meses era apenas una posibilidad remota.
Realidad que se ve materializada en este acto solemne y protocolario en el que daremos formal inicio a la Sexagésima Cuarta Asamblea de la FLAM y a la Reunión Anual del Grupo Iberoamericano de la UIM.
Encuentro de rango internacional en el que se cuenta con la presencia de 16 delegaciones provenientes de: Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, España, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana y Uruguay. Y con la presencia de representaciones de Italia e Inglaterra.
Jueces, magistradas y magistrados a quienes agradezco su visita y les extiendo una cordial bienvenida a nombre de todos los co-organizadores, pues aunque la anfitrionía corresponde al Poder Judicial de Yucatán, el mérito es compartido entre la FLAM, la UIM, la CONATRIB y por supuesto el Gobierno de Yucatán.
Agradezco también el invaluable apoyo y respaldo de mis compañeros magistrados y consejeros de la judicatura estatal, quienes han sido piedra angular en la organización de esta cumbre judicial.
Mención especial merece la asistencia a este evento de mis compañeros presidentes de tribunales superiores y supremos de justicia de los Estados de: Aguascalientes, Campeche, DF, Durango, Estado de México, Michoacán, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Veracruz, así como la representaciones de Chiapas, Nayarit y Sonora, a quienes reitero mi amistad y respeto de siempre, acompañados de mi gratitud por su presencia.
Por supuesto, distinguen con su presencia este evento la doctora Cristina Crespo presidenta de la Unión Internacional de Magistrados y el doctor Wilfredo Sagastume presidente de la Federación Latinoamericana de magistrados, saludo con afecto también a los miembros de la directiva, a los past presidents y a los delegados de cada país.
Señoras y señores:
La independencia judicial es un valor que preocupa e importa porque deviene directamente de los conceptos que dan sentido y justificación al Estado: soberanía, división de poderes, derechos fundamentales, sistema normativo y sistema económico, entre otros.
Es por tanto, punto de convergencia del desenvolvimiento sano del Estado de Derecho, a grado tal que se podría afirmar que un sistema democrático sin independencia judicial no puede alcanzar su plenitud, al no existir garantía de imparcialidad en la impartición de justicia.
Por ello, no es fortuito que desde su creación -varias décadas atrás- la FLAM y la UIM han luchado incansablemente por el fortalecimiento de los Poderes Judiciales a través de una real, permanente y efectiva independencia judicial.
Recordemos que la FLAM fue un decisivo aliado del Poder Judicial de Yucatán en la lucha por mantener su independencia cuando hace 10 años se pretendió destituir arbitrariamente a casi la totalidad de la magistratura estatal.
Estamos convencidos de que la independencia judicial debe catalogarse como el máximo triunfo del Estado de Derecho.
En tal sentido, estoy cierto de que esta asamblea contribuirá a la concreción de tan importante objetivo, pues en su seno habrán de discutirse problemáticas que son comunes a todos nuestros países en aras de arribar a soluciones compartidas.
A partir de hoy y durante los próximos dos días, Yucatán se convierte en escenario internacional de los grandes temas que involucran a la impartición de justicia.
Se constituye en epicentro de buenas prácticas y medidas útiles para el resguardo de nuestra independencia institucional.
Se transforma en caja de resonancia de estrategias y acciones que permitan a los tribunales reivindicar el rol protagónico que les corresponde.
Yucatán ha sido cuna de grandes juristas y trascendentes instituciones jurídicas. En 1841, con la visión de Manuel Crecencio Rejón, esta entidad vio nacer el Juicio de Amparo, que –a la postre- se convirtió en la institución Jurídica de protección de los derechos humanos más importante para América Latina y el mundo.
También Yucatán ha aportado los primeros derechos sociales constitucionalizados en el orbe, a través de los derechos laborales impulsados por Héctor Victoria en 1917.
Ahora -con esta confluencia de personalidades, con esta conjunción de voluntades y con esta sinergia judicial- estoy seguro de que una vez más esta “tierra del MAYAB” será referente internacional de la justicia, a partir de la “Declaración de Yucatán”. Documento fundamental que condensará las estrategias que habremos de diseñar y convenir en aras del fortalecimiento judicial.
Que así sea para beneficio de nuestras judicaturas, para bien del Estado de Derecho en nuestras naciones, y para bien de ese valor supremo llamado justicia.
Realizamos la mejor de nuestras aportaciones para fortalecer nuestros poderes judiciales pero también les pedimos que y disfruten esta tierra mágica, cuna de la civilización maya, una de las más avanzadas de América.
Enamórense de Yucatán, un estado pujante que mira de frente al futuro con orgullo y optimismo. Disfruten de sus ciudades coloniales, su naturaleza y sus imponentes sitios arqueológicos, pero sobre todo, la hospitalidad de su gente.
Bienvenidos a Yucatán.
Muchas gracias.