La justicia, valor supremo del derecho, debe ser ante todo humana: Ministro en Retiro José Trinidad Lanz Cárdenas
La justicia, valor supremo del derecho, debe ser ante todo humana: Ministro en Retiro José Trinidad Lanz Cárdenas
Mérida, Yucatán a 27 de septiembre de 2012.- La justicia es el valor supremo del derecho, expresó como una de sus reflexiones principales el Ministro en Retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Trinidad Lanz Cárdenas, quien esta tarde dictó la conferencia “Eso que llaman Justicia”, en el marco de la VII Semana Jurídica y Cultural del Poder Judicial del Estado de Yucatán (PJEY).
“Se habla de justicia e injusticia desde que el hombre es hombre, desde el primer crimen de Caín y Abel, en todas las épocas se ha hablado de justicia, es una palabra que están en la boca de todo el mundo y no requiere ciencia ni cultura para apreciarlas”, dijo ante jueces, magistrados, funcionarios judiciales y estudiantes que abarrotaron el auditorio de la sede del PJEY en esta ciudad el pasado jueves.
El Ministro citó diversos autores y orígenes remotos para reflexionar sobre la gran pregunta de todos los tiempos ¿Qué es justicia?, para concluir que no existe una definición exacta como tal.
Un campesino sin educación primaria si para el algo es justo o injusto y nos contestará cómo lo percibe, como sabe qué es justo o injusto, de dónde podría derivar tal concepción.
Citó al jurista, político y periodista italiano Pero Calamandrei, con su obra magistral “El elogio de los jueces” y a José Angel Osorio con su libro llamado “El alma de la toga” y recordó al mexicano Raúl Carrancá y Rivas, quien escribió la obra “El arte del derecho”.
Dijo que Carrancá examina algunos de los temas fundamentales relacionados con la justicia y su administración, insertándonos en lo que podríamos afirmar como el poema jurídico o el arte esencial del derecho.
“En mi concepto la justica es el valor superior del derecho y en la práctica quienes lo administran son los tribunales de 1ª. Instancia y las mas alta jerarquía”.
¿Cuántos tipos de justicia existen sobre el particular? Depende de las ramas, mercantil, obrera, política, constitucional, etc. y en el decurso de la historia occidental ha servido para llamar a quienes se les ha conocido como justicias, ejemplo los justicias de Aragón como uno de los mas remotos funcionarios de la justicia española, antecedentes lejanos pero directos de nuestro excelso juicio de amparo.
Lanz Cárdenas continuó recordando a Temis como la consejera de Zeus o Júpiter representada con los ojos vendados, con espada y balanza. “¿Qué significaba la diosa Temis?”, preguntó, “que la justicia debía ser imparcial no solo porque no veía sino por su naturaleza intuitiva, la justicia se conoce profundamente por la intuición, no es producto de una reflexión cultural o análisis lógico, sino de una percepción directa”, señaló.
“En los casos de la justicia, por encima de la frialdad y austeridad de las leyes o diversidad de los códigos deben prevalecer la frescura y el aroma de la flor, identificándola con la condición humana, la sensibilidad y la frescura, el derecho escrito y su aplicación en la administración de la justicia”, señaló el Ministro en Retiro.
¿Qué es la justicia? Ninguna otra cuestión ha sido tan apasionadamente discutida. Sobre ninguna otra han discutido y aún hoy esta sin respuesta, parecería que fuera una de esas preguntas con respecto a las cuales hubiera que renunciar con resignada sabiduría a encontrar una respuesta definitiva, expuso ante los asistentes para terminar con: “Hace mas de 2000 años sigue estando presente la pregunta”.
Señaló que han habido, a lo largo de la historia, por un lado definiciones metafísicas o espirituales y por otro las racionales.
Se ha dicho que la justicia es la voluntad de dar a cada quien lo suyo y eso no tiene réplica alguna, pero su análisis nos lleva a preguntarnos ¿qué es lo suyo?, ¿quién decide en ese conflicto interpersonal lo que es suyo o no es? y en un examen mas minucioso podríamos caer en un vicio, en una repetición, lo justo es lo que dice la ley y confundiríamos la justicia con la ley, pero la ley es solo la expresión de la norma.
Consideró que “los antiguos juristas romanos eran gigantes en el derecho civil, pero pigmeos en el derecho penal y no obstante dejaron conocimientos básicos que sirven a todas las generaciones del mundo occidental, incluyendo a los anglosajones”.
Se refirió a los conocidos tres principios generales del derecho: vivir honestamente, no dañar a nadie y dar a cada quien lo suyo. “Sin embargo esta concepción definitoria no nos dice qué es la justicia”.
La justicia es una perfección interior, virtud que radica en el alma.
En el debate de Platón entre Sócrates y los sofistas cuando ellos exigían que cumpliera con las disposiciones de la ley vigente para evitar tener que ser sacrificado con cicuta él les contesto la justicia no es la simple adaptación a la voluntad del gobierno y la sujeción a la voluntad de la ley, la justicia es íntima y cada quien la lleva por su simple condición de hombre.
La justicia es la reina de todas las virtudes, la justicia no se ve, no se toca, solo se percibe, sólo se percibe con la intuición.
Tenemos el ejemplo de los Nazis que, apoyados en leyes aparentemente justas, expedidas y aplicadas por el régimen de Hitler, cometieron actos completamente injustos. Estos y otros ejemplos de la humanidad nos conducen a afirmar que no debemos confundir o menospreciar a la ley con la administración de la justicia. No debemos confundir a la justicia con la Ley, es algo inconfundible con la Ley.
Volvamos al campesino que percibe la justicia sin razonamientos previos, por eso en la lucha por el derecho tenemos que caminar por este orden de ideas.
Basándonos en Carrancá la ley y la justica son fenómenos culturales, profundamente humanos.
Y continuó recordando la filosofía de Santo Tomás de Aquino.
“Los grandes pensadores como Aristóteles y Santo Tomás de Aquino hablaban solo de dos tipos de justicia, la conmutativa y la distributiva, pero la ciencia jurídica moderna afirma otras dos la justicia legal y la justicia social.
El hecho, dijo, es que la justicia moldea las relaciones de persona a persona, pero esas relaciones pueden darse de individuo a individuo como personas privadas y tenemos a la justicia conmutativa cuando están en grado de igualdad cuando celebran un contrato, una operación mercantil.
O bien de autoridad a sus súbditos, justicia distributiva, o sea la comunidad y cada individuo.
Incluso expresó que la aportación de Jesucristo a la justicia fue “acabar con el ojo por ojo y diente por diente y sustituirla por mensaje de amor a la humanidad”.
Se refirió al “derecho injusto”. Cómo se puede hablar de derecho injusto? Lo cierto es que ha habido numerosos casos de derecho injusto, que resulta cuando al aplicarse el derecho vigente se lesionan algunos de los valores del hombre, como puede ser la igualdad, la integridad, la seguridad, la propia vida y otros valores improtegidos.
Recordó la obra de William Shakespeare “El mercader de Venecia” como ejemplo de la perfecta conciliación entre la ley y la justicia, cuando se condena a “Antonio” a pagar al usurero con una libra de carne de su propio pecho, pero estableciendo que, si al cortar la carne se derramaba una gota de sangre no comprendida en el contrato, se confiscarían al usurero todos su bienes y sería expulsado.
Hay leyes justas y leyes injustas? Sí y las han habido en el curso de la historia porque el legislador no es perfecto o puede responder a otros valores, objetivos o ponderación al emitir las leyes.
A veces se han sacrificado la libertad en pro de la seguridad económica por lo que muchas leyes en diversos países atropellan estos valores y podemos afirmar que con esos ejemplos históricos han existido muchas leyes injustas.
“Volvemos a los extremos Hilterianos, bien diseñados pero injustos”, dijo Lanz Cárdenas.
Como parte de la cuarta jornada de nuestra VII Semana Jurídica y Cultural del Poder Judicial del Estado se llevo a cabo un simulacro de audiencia ante la corte interamericana de derechos humanos el cual se efectuó en el Tribunal Superior de Justicia con alumnos de la Universidad Marista
En esta jornada, y en presencia del Ministro Lanz, los magistrados y consejeros del PJEY entregaron incentivos por antigüedad a mas de 70 trabajadores del PJEY: a 15 trabajadores pos 10 años, 20 trabajadores por 15 años, 26 trabajadores por 20 años, 10 trabajadores por 25 años y 3 trabajadores por 30 años de servicio.